Joan Llaneras se despide del ciclismo al más alto nivel con una nueva medalla, la cuarta en su periplo olímpico, esta vez en compañía de Toni Tauler. Y es que la pareja española lograba la plata por detrás de Argentina, Juan Esteban Curuchet y Walter Pérez, superando in extremis a Rusia, con Alexei Markov y Mikhail Ignatiev.
Y es que, terminada la prueba, España no tenía en el marcador la puntuación ganada en el velódromo, al parecer por una discrepancia en el momento de darle la vuelta ganada, antes de una puntuación que realmente había ganado. Y aunque España tenía por lo menos asegurado el bronce, costó muchos minutos de discusiones convencer de que España sumaba 7 puntos, frente a los 6 de Rusia, para subir al segundo escalón del podio, detrás de Argentina, que sumaba 8.
La pareja española no se movió hasta mitad de carrera, sin ver ni a Tauler ni a Llaneras en ningún momento entre los mejores, conscientes de que sus posibilidades pasaban por ganar vuelta cuando se ‘tensara’ la prueba. En esos primeros 105 giros, lo más destacable fue la vuelta cogida por Argentina y Rusia –también la lograron Italia y Canadá, pero la perdieron rápidamente-, y la igualdad en el reparto de las cinco puntuaciones, sin que se destacase ningún equipo. Especialmente se echaba en falta a los británicos, de los que todo el mundo apostaba por su protagonismo en los sprints con el rapidísimo Marc Cavendish. Pero fueron la decepción ya que no aparecieron en carrera en ningún momento.
Fue a falta de 95 cuando España lanzó su potentísimo ataque que le permitía ganar vuelta y sumar cinco puntos, en el sexto sprint, aunque con una cierta polémica ya que los jueces tardaron muchísimo tiempo en oficializar esa situación que nos metía en la lucha por los metales junto a rusos y argentinos. De hecho, hasta minutos después de acabada la prueba no se clarificó la situación.
Mientras tanto, Bélgica, Alemania y Dinamarca se comenzaban a mostrar como las selecciones más rápidas a la hora de sumar puntos, aunque sin posibilidad de ganar vuelta lo que les impedía entrar en la lucha por las medallas, que estaba entre Argentina (ocho puntos), Rusia (seis) y España (cinco o cero, según los jueces)
De esa manera se legaba al último sprint con las tres selecciones pudiendo ocupar cualquier puesto. Yendo por delante daneses y franceses, la tercera plaza podía dar la plata a los españoles y así fue, con Llaneras sumando esos dos puntos en un fenomental sprint –en su última competición oficial en un velódromo- para lograr la plata olímpica. Su cuarto metal.
"Real Federación Española de Ciclismo"
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